Si, así lo consideramos, pues cada casa de Umbanda, tiene su propio ritual, pero si hemos de hacer justicia, todos tenemos mas puntos en común en este particular que en muchos otros, es por eso que tratando de navegar por la línea del medio, intentaremos de exponer los pasos fundamentales para llevar una sesión de Umbanda típica, con el mayor éxito.
La Terreira es el espacio fundamental donde los trabajos se realizan. Una Terreira (Templo,
Tabernáculo), de Umbanda está ubicada, generalmente, en la misma casa del Jefe o Jefa de la misma. En los años que llevamos visitando Templos de Umbanda, hemos observado que el espacio físico que ocupa el Congal, dentro de la casa, es tan variado como imaginable. Muchos Caciques, sacrifican la principal habitación de su morada, para emplazar la Terreira, esto es en la mayoría de las casas el Living-comedor, que por lo general es el espacio físico
de destaque. Pero en lugares mas modesto, hasta sacrifican la intimidad de sus
dormitorios... Si, esto es de subrayar aunque parezca increíble. En muchos de
los casos, el espacio para la concurrencia, queda reducido a el lugar que ocupan
4 o 5 sillas hacinadas. Ni hablar del sacrificio que hacen los médium para
desarrollarse en espacios, las mas veces, tremendamente reducidos.
Consideremos
que las Terreiras de Umbanda, no son templos de lucro, ni de opulencia, y son
mantenidas con el magro aporte de los fieles, concurrencia, y las mas veces del
menguado salario del dueño de casa, que deseoso de impartir la Caridad, dar
culto a sus Caboclos y Pretos, no repara en gastos, compartiendo sus recursos con la sociedad.
No entraremos en detalles, como por ejemplo, que la disposición de la terreira ideal, observa una orientación específica con los puntos cardinales,
tiene que estar ubicada en tierra, y que la iluminación y aireación es
importantísima. Además de tener suma importancia las comodidades propias al
decoro e higiene, (vestuarios, baños, duchas, sala de descanso y espera, etc.),
también es importante tener una salita dedicada a rituales herméticos, propios
de nuestra religión y un lugar donde disponer de una mesa, para la lectura de
los Santos Evangelios, entre otras cosas. Pero ya hemos visto que esto, en
general, es casi
imposible.
Congal de la Cabaña de Pai Antonio (RJ).
Este es el altar de la Terreira que fundó el Maestro Zelio de Moraes, en la localidad de "Boca do Mato" (localidad de el Municipio de Cachoeiras de Macacu, a 160 kilómetros de Rio de Janeiro)
Caboclo 7 Flechas firmando un trabajo.
Ya la concurrencia, (que ingresa al salón antes que los médium y el Jefe), han sido recibidos por el
auxiliar del templo, "Cambón", que todo vestido de blanco, acomoda a los
feligreses, que vienen a pedir consejos y alivio de sus aflicciones a las
entidades que dentro de muy poco tiempo incorporarán en los médium del terreiro.
Seguidamente todas las personas que participarán en el ritual, inmaculadamente vestidas de blanco,
(con pantalones los hombres y polleras las mujeres), ingresan precedidos por el Maestro.
El ritual (sesión), de Umbanda lo inicia el Jefe, Cacique o
Maestro, con un rezo que puede ser, por ejemplo, el Padre Nuestro y/o una oración invocando a Dios, la cual puede ser o no coreada por los médium presentes;
damos a continuación un vínculo para una Oración que recomendamos usar:
.
Luego se invoca una plegaria para la apertura y el buen desarrollo de los trabajos,
aquí les brindamos un vínculo a una de estas oraciones, quizás la mas tradicional:
.
En seguida de terminada estas (oraciones), el auxiliar del templo, el Cambón, entra al recinto con
un incensario, sahumando a todos los presentes, y todos los rincones del recinto,
siendo acompañado este acto con el canto de un punto acorde.
A continuación, primero el Jefe y luego los médium presentes "baten cabeza", (reverencia, en cuyo
desarrollo se efectúa una genuflexión y se apoya repetidamente la frente en el piso, por lo general
tres veces: 1°=Padre (Obatalá), 2°=Hijo (Oxalá) y 3°=Espíritu Santo (Ifá)
†), por lo general en un punto,
(dibujo arcano), de
firmeza, dibujado en el piso centrado a los pies del Altar, por el Cacique, con una
"pemba"
blanca, (esto es una suerte de tiza especial, con forma ovoide, que se usa en los rituales). En este acto, se puede cantar un punto de
"batir cabeza", de ahora en
mas, hasta el cierre de la "Gira", cada acto, se acompaña con cánticos acordes,
llamados "puntos cantados". Luego con un saludo singular, denominado "Sarabá", todos los
médium presentes, colocados en dos bandas, saludan al Maestro, que al frente y a
un lado del Congal, por lo general a la derecha, enfrentando a la grey, se
encuentra apostado, y a continuación se saludan entre si. Este saludo se
acompaña con un estrechamiento y entrecruzar de los hombros, y a veces con
ósculos mutuos, en las manos derechas o en ambas manos, comenzando por la
derecha (llamado "Benza").
La "Gira" está abierta... Esto es lo mas resaltante del ritual:
La "Gira" está cerrada... Por
supuesto, volvemos a repetir, hay pequeñas variantes, pero esta compendiosa narración
ilumina el carácter y sustancia reinante en las Sesiones de Umbanda.
¡Sarabá Umbanda querida!
© 2005 Web Umbanda.
Los médium estarán ahora elevándose, mientras corean los puntos a los Santos,
Jefes de Falanges, y Entidades habitué del Terreiro, cerrando la "corriente" (se
disponen de forma de "U" o "V", cerrando ambos lados del altar). De pronto,
después de un aviso estertóreo, la entidad que incorpora el Cacique del Templo,
cabalgará al mismo, y comenzará a girar, a guisa de vertiginosa peonza,
exaltando el fervor de los cánticos, que corean los médium y quizás la
concurrencia, a esta altura muchos, quizás aplaudan, victoreando la llegada del
Pai o Mãe, que está "bajando" desde el mas allá, llamado Aruanda
(Astral). Este espíritu,
que de ahora en más, conducirá la "Gira", irá ordenando a sus cofrades del mas
allá, que cabalguen a los médium, ("cabalhos", "aparelhos"), allí presentes.
Uno a uno, los médium ya "prontos", (estos son los médium que ya están iniciados
y que tienen alguna experiencia de incorporación), empezarán a girar, recibiendo
sus entidades.
Uno a uno los guías, ahora poseyendo a sus hijos, tomarán sus
lugares preestablecidos en la "Terreira", no sin antes reverenciar el
Tabernáculo (Congá, Congal), de
distintas formas, según su falange y costumbre.
Cuando los médium estén todos "cabalgados", incorporados, los
Guías, por orden saludarán al Cacique, con el particular saludo, "Sarabá", de la
forma característica ya descripta, con algunas variantes, según el Guía. A
continuación los integrantes del culto que aun no incorporan, o no han
incorporado por alguna causa, saludarán a los Guías, ("sarabarán"). El "Cambón" recorrerá, entonces, la "Línea", interrogando a los Guías, por si necesitan alguna vitualla.
Largo y complejo sería describir las necesidades de los Protectores presentes en una
sesión dada, pero enumeraremos algunas: cigarros, cigarrillos, agua, agua ardiente, ruda, pemba, cachimbo, troncos (para sentarse), toallas, etc.,
etc., todas estas cosas servirán para trabajar en el áurea, (nimbo, cuerpo
nictitante), del "Aparelho" (médium), recibir, también, energía extra, entre otras cosas, y para prepararse en el trabajo que deberán efectuar con la concurrencia.
Ya los Protectores han limpiado los cuerpos astrales de sus hijos,("descarregándolos"), bebieron aumentando la energía disponible
de sus "materias", han hablado entre ellos, ya están listos para trabajar...
El Cacique dispone el comienzo de los trabajos con la concurrencia.
Una a una las personas de la asistencia irán recorriendo la
"Línea" consultando con los Guías, entonces ellos tendrán, en principio, una
sucinta
charla con los consultantes, y a continuación les harán un "pase" de limpieza del áurea. Cuando el consultante llega a
el Maestro, este le marcará algún trabajo espiritual, si es conveniente, o le dará consejos sobre sus necesidades actuales y/o futuras,
sobre cuestiones espirituales y materiales. Si todo va bien, después de
la consulta, Los Protectores se irán despidiendo, no si antes dejar sus
bendiciones y habiéndose saludado mutuamente, llevándose la carga espiritual
negativa,
remanente de la consulta. Casi siempre, el último "Pai" en retirarse es el Guía
Jefe de el Cacique del "Congal". Este al despertar pregunta a todos los
presentes si estos están bien.
A continuación se cierra la sesión con "puntos" cantados
acordes al momento y una oración de cierre, he aquí un vínculo a un modelo de
oración de cierre:
.
Juan G. Abreu